Modelo de Contrato de Distribución

Modelo Contrato Distribucion

Un modelo de contrato de distribución te servirá en caso de que seas un empresario y quieras ponerte en contacto con otra parte, de forma tal que puedas generar colaboraciones o distribución de productos. Por lo tanto, veamos todas las características de este tan particular vínculo.

Modelo de contrato de distribución

[su_panel] [gravityform id=»40″ title=»false» description=»false»] [/su_panel]

Ahora puedes imprimir tu contrato personalizado con tus datos, tan solo tienes que rellenar este formulario y descargar el PDF.


Ejemplos de contratos de distribución para descargar

[su_row] [su_column size=»1/2″ center=»no» class=»»]

Descargar Modelo Contrato de

[/su_column] [su_column size=»1/2″ center=»no» class=»»]

Modelo Contrato de
[/su_column] [/su_row]


Por si te sirven, aquí tienes otros contratos similares:


¿Qué es un contrato de distribución?

Antes de pasar a ver un modelo de un contrato de proveedores en la distribución, debemos comprender que este vínculo marca condiciones en un documento formal entre las dos partes. Es decir, se trata de un texto de índole comercial, donde el distribuidor se compromete a comprar y distribuir los productos en una determinada zona geográfica.

De esta manera, debemos comprender que debe haber una delimitación de los productos que se distribuirán, generalmente con una exclusividad de territorio. Los precios y la actualización de estos deberán ser brindados de manera frecuente, además de cláusulas que impliquen un mínimo de compras y ventas para que esta relación siga prosperando.

No obstante, también es fundamental saber que cualquier contrato de compraventa de mercancía y distribución exclusiva implica un libre acuerdo de las condiciones que se crean necesarias. Esto significa que las responsabilidades se adjudicarán en función de los intereses de las partes.

Lo que notamos es que la distribución comercial intenta expandirse cada vez más, adoptando nuevas maneras de vincularse entre las distintas empresas, como ocurre con el cambio de mercaderías o la integración de las marcas. Es decir, siempre la persona que dará los derechos a otra buscará obtener el mayor rédito posible, motivo por el cual el contrato siempre se sustentará sobre la posibilidad del lucro.

La idea siempre es generar el mayor beneficio posible, motivo por el cual vemos que la distribución implica alcanzar cada vez mercados más amplios bajo un mismo nombre, estandarizando el producto, reduciendo los costes y escalando alto.

Un modelo de contrato de distribución selectiva se genera en función de las necesidades de los mercados modernos, que requieren la creación de una cadena de comerciantes donde los intermediarios puedan actuar en nombre de la marca, delegando las responsabilidades de la expansión hacia otros sectores, haciendo que el proceso productivo forme nuevos canales de red de distribución.

Cabe aclarar que estamos hablando de un tipo de contrato atípico, que no tiene regulaciones específicas dentro del derecho. Sin embargo, se puede interpretar perfectamente dentro de la Ley 12/1992 del 27 de mayo, donde se lo relaciona con el contrato de agencia. Además, ingresa perfectamente en la cuestión de la competencia del Reglamento (UE) n° 330/2024, de 20 de abril (Reglamento de exención por categorías), además de las normas del Código de Comercio relativas a la formación y validez de los contratos.

Tipos de contratos de distribución

Como te imaginarás, no existe un único contrato de distribución. Podemos dividirlos en 3:

Concesión comercial

Básicamente, un contrato de distribución exclusiva implica la aparición de un comerciante, que hace que su establecimiento aparezca en relación con un empresario tercero, asegurando que el territorio estará bajo su control, comercializando todos sus productos de la propia marca en función de las condiciones determinadas.

Es decir, vemos que aparece un sistema donde todas las partes se responsabilizan de que no habrá otros distribuidores en un territorio, de forma tal que no se revendan los productos en forma exclusiva. Esto significa que se podrá controlar la oferta de los productos para que la red comercial pueda funcionar de la mejor forma posible.

Distribución selectiva

Un contrato de distribución selectiva implica un establecimiento autorizado, de ahí a que también se conozca con ese nombre. Aquí hablamos de una relación donde un proveedor garantiza la venta de sus productos únicamente a distribuidores seleccionados de acuerdo con indicaciones específicas.

Los proveedores, a su vez, aseguran las reventas a través de la no-exclusividad, respetando las instrucciones que se habían mencionado en el acuerdo, aunque teniendo la prohibición de no vendérselos a los distribuidores no-autorizados. Se trata de un contrato similar al de la concesión, aunque aquí hay una mayor autonomía en términos territoriales, pudiendo comercializar con distintas marcas.

Franquicia

Otra posibilidad o variante se da a través de los contratos de franquicias. En este caso, aparece el franquiciador, que le genera conocimientos técnicos o comerciales secretos a una persona para que las aplique a su negocio, avalando la utilización de las insignias distintivas de la marca.

Es lo que ocurre cuando se genera un nuevo “local” de un establecimiento de comida, donde alguien “compra” todos los derechos, incluyendo los distintos menús y preparaciones, además de los derechos del establecimiento al utilizar los logotipos o los colores representativos de esa empresa, por lo que se ceden todos los derechos empresariales de la base.

¿Cómo es un modelo de contrato de distribución?

Ahora que aprendimos los tipos existentes, podemos ver qué es lo que necesita tener un modelo de contrato de distribución.

  • En primer lugar, deberá haber una identificación de las partes. Esto significa que se deberá nombrar al distribuidor y al proveedor.
  • Luego deberá dejarse en claro qué es el producto o el servicio que será revendido por parte del distribuidor. Esto implica una aclaración por escrito, de forma tal que no queden agujeros legales en sus definiciones.
  • El precio del producto también deberá aclararse, pues suele estar aclarado, junto con el volumen mínima de compra que deberá asegurarse de manera regular. Además, la forma de pago y la duración del contrato son fundamentales para que el vínculo tenga todos los detalles necesarios.
  • El territorio también deberá aclararse, pudiendo ser un contrato de exclusividad en cuestiones geográficas.
  • Las obligaciones de las partes también deberán incluirse. Por parte del distribuidor, tendrá que asegurar el pago de los productos que el empresario había comprado según los términos y las condiciones aclaradas previamente, además de cumplir con las condiciones de volumen mínimas registradas. Otro punto será aclararle al distribuidor toda la información necesaria para la reventa, además de asegurar la publicidad al empresario.
  • Por parte de proveedor, deberá dar todas las condiciones y plazos pactados en el contrato, facilitando toda la asistencia técnica necesaria para que el proceso pueda simplificarse o hacerse de manera correcta.